Río de Aguas


 DESCRIPCIÓN GENERAL

 COMUNIDADES VEGETALES

 ITINERARIO

 RECOMENDACIONES

 

 

 

 

 

 

 

 

DESCRIPCIÓN GENERAL

 

El área del Río de Aguas ofrece interés por sus aspectos geológicos botánicos, paisajísticos y, sobre todo, espeleológicos. Situada al Este de la provincia, a una hora de la capital, el núcleo de población más importante es Sorbas, a 447 metros de altitud y con 4.127 habitantes. De origen ibero, posee ruinas de un castillo árabe, siendo la característica más sobresaliente, su emplazamiento sobre un meandro encajado del río Aguas, al que se asoman sus casas colgantes.

Las fiestas patronales se celebran en el mes de agosto, dedicadas a San Roque, entre los días 14 y 17. Hay que destacar el mercado que tiene lugar todos los jueves del año. Se accede al espacio a través de la CN-340 y por la carretera comarcal de Níjar a Sorbas, que permite la entrada desde el Sur. En su interior se encuentran numerosos caminos de servidumbre con carriles que lo atraviesan, comunicando las cortijadas de Huelí, Las Viñicas y Molinos del Río Aguas, así como las canteras de extracción de yeso.

Los recursos agrarios en el Río de Aguas son mínimos, con apenas un 25% dedicado al cultivo del cereal secano, estando el resto ocupado por campos secos improductivos. La falta de regadío, suelos pobres y una estructura de la propiedad en la que domina el minifundio, son las causas que mantienen esta agricultura tradicional de subsistencia. El principal recurso de la comarca lo constituye la existencia de grandes paquetes de yesos, explotados en canteras a cielo abierto; sin embargo esta actividad extractiva constituye una grave amenaza para la conservación del complejo kárstico del Río de Aguas, mientras no se culmine el Plan de Uso y Gestión para este paraje natural.

El enclave kárstico es de gran belleza, al estar surcado por el Río Aguas y ramblas que desembocan en él. El río atraviesa una extensa capa de yesos, encajándose en profundos cañones, en los que, debido a las surgencias, aparecen pequeñas pozas y charcas, que se mantienen a lo largo de todo el año. Ello posibilita la aparición de pequeños oasis de vegetación hidrófila, que destacan en el contexto árido de los yesos. Desde las zonas mas altas se divisan las Sierras de Cabrera y Alhamilla al Sur, y el impresionante macizo de los Filabres, al Norte.

Su clima, uno de los más áridos de la provincia, se caracteriza por unas 3.000 horas de sol al año y precipitaciones anuales de sólo 250 mm, distribuidas de forma irregular y da carácter torrencial.

Desde el punto de vista geológico, señalar, la presencia de limos junto con areniscas y conglomerados, a los que se superponen niveles de calcarenitas que debido a su mayor competencia, originan relieves más abruptos. Lo más espectacular de esta área, es la presencia de gruesas capas de yesos, sobre las que se excava un singular complejo kárstico.

El tapiz vegetal está integrado por tomillares aclarados, en los que aparecen grupos de plantas propias de los lugares donde se encuentra el yeso, restringidas a esta localidad. En los remansos de agua permanente aparece una vegetación exuberante de eneas, carrizos y cañas.

En un contexto de fauna estepárica, destaca la presencia del galápago leproso, en los remansos del Río de Aguas, y de la tortuga mora, que tiene en la vecina sierra de Cabrera uno de sus últimos lugares de supervivencia.

Al atravesar esta área observamos diferentes formas debidas a los distintos comportamientos mecánicos de las rocas y a la acción del clima sobre ellas. Aparecen cornisas, que marcan resaltes en los materiales más duros, mientras que, en los blandos, se producen abarrancamientos.

El principal interés del espacio, desde el punto de vista geomorfológico, radica en la gran extensión y espesor que alcanzan los yesos. Destacan los fenómenos de disolución que en ellos se originan por la acción del agua de lluvia (modelado kárstico). Entre las formas más comunes, aparecen en superficie las dolinas en embudo, simas y microlapiaces, que se encuentran conectadas con un complejo subterráneo al que se puede acceder por distintas entradas. Son las principales la Cueva del Agua y Covadura, ambas con varios kilómetros de recorrido apareciendo en su trayecto pozos y galerías que desembocan en amplias salas con estalactitas y estalagmitas.

 

COMUNIDADES VEGETALES

 

La comarca del Río de Aguas aparece encuadrada en el mapa de la vegetación potencial del Sudeste de la Península, dentro de una comunidad vegetal llamada “Chamaeropo-Rhamnetun”. Lo que significa que su vegetación primitiva la formaron extensos palmitales y matorrales de rannaceas entre las estribaciones de Sierra Alhamilla y Cabrera. El paisaje vegetal es actualmente muy distinto: sobre los sustratos de yeso crecen con dificultad comunidades de tomillares que, por un lado, le confieren un carácter de estepa árida y subdesértica, y, por otro, presentan un gran interés florístico, puesto que las mismas características del clima y del suelo han favorecido la aparición de especies nuevas (“endemismos gypsófilos”).

En la asociación más genuina de los yesares abundan y son plantas características “Santolina viscosa”, “Ononis tridentata” y “Gipsóphila struthiun”, pero su auténtico interés científico, que explica el elevado número de botánicos que la visitan, radica en la presencia de la labiada “Teucrium turredanum”, endémica comarcal, poco conocida y herborizada, por florecer en Agosto; la cistácea “Helianthemum alypoides”, también exclusiva de la comarca, que florece en primavera, y la descubierta más recientemente “Narcissus tortifolius”. Numerosas especies compañeras como la crucífera “Guiraoa arvensis” que se puede encontrar en rincones nitrófilos en la rambla del Río de Aguas, o la labiada “Teucrium freynii”, también exclusiva de la comarca, confirman el interés botánico del espacio.

En los tramos donde el agua se remansa y se mantiene permanente durante todo el año, gracias a las surgencias del relieve kárstico, por el que circulan los meandros del Río de Aguas, aparece la vegetación de eneas y carrizos, refugio de la fauna acuática y elemento destacado en un paisaje vegetal desolador y subdesértico.

 

ITINERARIO

 

La visita que proponemos en este espacio se presenta estructurada en dos partes que tratan de cubrir los aspectos más sobresalientes del mismo. La primera parte se inicia en la cortijada de “Molinos del Río Aguas”, que dista 7 Km del cruce con la CN-340, pasado el pueblo de Sorbas. Dejamos el vehículo en la citada cortijada y nos dirigimos a pie al lecho del Río Aguas. Remontando curso arriba, podemos observar la existencia de un angosto cañón de paredes verticales, excavado en el paquete de yesos, cuyo lecho aparece ocupado por bloques de robustas y grandes dimensiones, encontrándose filones de yeso laminar de gran belleza.

A través del Río de Aguas se produce el drenaje del complejo Kárstico de yesos, lo que se traduce en la existencia de unas surgencias que se mantienen en el transcurso del año, permitiendo con el aporte de sus aguas la existencia de charcas y pozas que sustentan una rica vegetación higrófila de carrizos, eneas y juncos, junto a un pequeño bosque de galería muy aclarado y de origen humano. Las charcas y remansos sostienen una comunidad de reptiles, donde resaltan el galápago leproso y en algunos enclaves próximos la tortuga mora. Constituye un lugar idóneo para pasar una jornada y refugiarse durante los duros calores del verano.

Una segunda parte, independiente de la anterior, consiste en un recorrido por la plataforma superior del paquete de yesos. Para ello, accedemos por el camino que conduce a las canteras de yesos, que parte de la CN-340 y distante 13 Km aproximadamente del pueblo de Sorbas. Existen múltiples carriles que la surcan, dirigiéndose a pequeñas viviendas rurales abandonadas.

Se aconseja, al transitar en automóvil por estos carriles, el máximo de precaución debido a los orificios que aparecen a consecuencia de fenómenos de disolución. En este recorrido fácilmente podemos ver las típicas formas de modelado Kárstico superficial. como: lapiaz, dolinas, pequeñas uvalas, profundos cañones de gran espectacularidad y que proporcionan al conjunto un singular valor escénico. Estas formas kársticas superficiales tienen conexión con una extensa red de galerías, pozos y cavernas que hacen del complejo kárstico en yesos de Sorbas, uno de los más importantes de toda Europa. Para los botánicos, constituye esta plataforma un paraíso florístico ya que alberga endemismos gypsófilos únicos en el sureste español.

 

RECOMENDACIONES

 

– Dada la existencia de filones rellenos de yeso cristalino fuera del paraje natural y en las canteras, es aconsejable llevar martillo de geólogo para la recolección de muestras.

– Para los aficionados a la botánica es aconsejable su visita en las estaciones de primavera y verano.

– La espectacularidad del paisaje aconseja el uso de cámaras fotográficas y de prismáticos para los amantes de la ornitología.

– La abrupta topografía del paraje aconseja el utilizar un automóvil “todo terreno”.

Para desarrollar actividades espeleológicas es necesario contactar con la Federación Andaluza de Espeleología y con la AMA.

El Karst de Sorbas debe ser paradigma entre el uso racional de los recursos mineros y la conservación de los valores naturales.